El clown

Esta mañana me he despertado y me he dado de bruces con la cara de un payaso que me miraba con los ojos muy abiertos.Aunque algo subrealista,no cabe duda,era la cara de un payaso vestido de Papa Noel,con su barba blanca y su gorro tan rojo como su nariz.Solo que al fijarme algo mejor he visto algo extraño en sus ojos,su ojo derecho era algo más grande,en realidad bastante más grande,y tenía mucha más luz;dentro de este se apreciaba con claridad la forma rectangular de una ventana,una ventana de madera con sus limpios cristales translucidos.
A través de la ventana,en primer plano se vé parte de una terraza desdibujada por una mosquitera,y digo parte porque de repente me encuentro en un plano inferior del ojo,digo de la ventana,como si estubiese sentada en el suelo y el alfeizar quedase a la altura de mi frente.Más allá de la ventana de madera con sus limpios cristales y su mosquiera,más allá de ese trozo de terraza,se abre como unabanico un mundo de cúpulas y tejados,torres y buardillas cn un fondo blanco y azul celeste.
Al mirar a través de ella mi alma se llena de felicidad y melancolía,de recuerdos de un amor que no fué perfecto pero que en la distancia lo parece,que no fué posible y por eso mismo se ha hecho eterno.¡Cuanto poeta loco preguntandose donde va el amor!y el amor no va a ninguna parte,se transforma y evoluciona como el cauce de un rio ó simplemente se queda ahí,enquistandose,comiendote a mordisquitos las entrañas y dejandote de por vida regurguitaciones amargas.
No es esto último lo que siento al contemplar los tejados a través de tu mirada,clown.O tal vez sí.
Recuerdo mi cuerpo más joven y mi mente más inquieta,más confusa pero más libre.recuerdo temblar bajo sus manos,estremecerme al contacto de su cuerpo,una sensación de plenitud tan arroyadora que diluía los límites de la realidad,que lo aniquilaba todo,el tiempo,el miedo,la responsabilidad,la cordura.Cuando uno ha amado con tanta pasión,con tantas ganas ,incluso con tanta rabia y violencia,cuando uno ha mordido el cuerpo del otro para beber su sangre,cuando tu cuerpo a dejado de ser tuyo para plegarse a los desos del otro,cuando ya no te queda nada que perder,comprendes el principio de la relatividad,todo es relativo.
Hoy con el tiempo y la distancia como aliados puedo mirar a traves de tu ventana sin sentir vértigo,clown,sin tener la impresión de que mi alma se está derramando sobre los tejados como la lluvia.Hoy pese a que no llevaba despierta ni un par de minutos,pese a queno había hecho más que abrir los ojos me he enfrentado a tu mirada ,despojo de la Navidad y he visto lo que no quería ver,a traves de tu ojo, engendro circense,hibrido payaso subrealista.
Imagino en tu ojo izquierdo un cuarto oscuro,una cama y un hombre tumbado en ella con los brazos cruzados,cubierto por capas y capas de ropa,su expresión concentrada no deja adivinar por qué lugares andará vagando su mente.No me es indiferente pero está tan acorazado que me es imposible llegar a él.Resulta algo frustrante estar agarrada a los barrotes de su celda y no oir siquiera su respiración,lo mismo dá ,aunque consiguiesemos hacerlo hablar no lograríamos que de sus palabras se transluciese ni un misero sentimiento,no es que no los tenga pero eso no lo debe saber nadie,su silencio es un escudo,su ropa su armadura y aún no puede prescindir de ellos.
Quizá si sigo colgada de los barrotes,si se acostumbra a mi presencia,si soy constante,si soy sincer venga el Cown Noel y me convierta en manta termica,entonces él podrá taparse con ella y mi calor será tan fuerte que fundirá su armadura y su escudo.Y podré abrazar su cuerpo desnudo y él sentirá también que todo es relativo.
Mañana cuando despierte no habrá payaso y ya no será Navida.O quien sabe,todo es tan relativo.